El presidente de CONVEAGRO, Andrés Luna Vargas, exigió a las autoridades de la Región Piura la captura y ejemplar sanción para el asesino del comunero Arcesio Gonza Castillo, muerto a puñaladas por un desconoicido que cubría su rostro con una mascara. El homicidio ocurrió el domingo 22, al promediar las ocho de la noche, cerca de su lar ded Suyo, Ayabaca.
Arcesio fue un combativo dirigente de la Comunidad Campesina Santa Rosa y acérrimo defensor del medio ambiente. Se presume que su lucha en defensa del agro le habría costado la vida, tal como le sucedio hace algún tiempo, al ingeniero y agricultor chulucanense, Godofredo García Baca.
El ingeniero Godofredo García Baca fue asesinado el sábado 31 de marzo del 2001, cuando se dirigía a su parcela de Somate Bajo, San Lorenzo. Un asesino, ahora en prisión, lo emboscó y le disparó a quemarropa. Viajaba de copiloto de su hijo Ulises, quien manejaba la camioneta de propiedad de su padre.
El comunero,a decir del presidente de CONVEAGRO, denunció la presencia en Suyo de una planta procesadora de minerales, según versiones, de inversionistas chilenos y ecuatorianos, sin que tuvieran alguna licencia social o legalidad admitida.
También, el directivo de Convención Nacional del Agro Peruano pidió el retiro y desmantelamiento inmediato de toda planta procesadora de material mineralizado en el ámbito de los distritos de Suyo y Las Lomas.
Estas plantas, a decir de Luna Vargas, son ilegales y atentan contra decenas de miles de pequeños agricultores de los Valles de San Lorenzo y del Valle del Río Chira, por los relaves y desechos con mercurio y cianuro que ponen en riesgo la vida humana y la agricultura.
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